La noticia ha provocado una oleada de críticas en redes sociales. Los usuarios señalaron que mientras Snoopy encuentra un nuevo hogar, Suárez se une a las filas del paro. "Así trata Defensa a nuestros veteranos", lamentó un usuario, denunciando la falta de una ley de personal adecuada que valore la experiencia y formación de estos militares.

Las críticas no se detuvieron allí. Muchos destacaron que Suárez, con su vasta experiencia, equivale a diez nuevos reclutas. "Tendrán que gastar dinero en formar a alguien nuevo para que sepa lo que él ya sabe", expresó otro usuario, calificando de "nefasta" la gestión del Ministerio de Defensa y pidiendo una solución urgente para esta situación.

La política de despidos a los 45 años ha sido tildada de suicida y absurda. "Se está desperdiciando a una generación de hombres y mujeres que han servido en nuestras Fuerzas Armadas con un valor enorme", sentenció un comentario. Las críticas apuntan no solo al Poder Ejecutivo, responsable en su mayoría de estas decisiones, sino también a las autoridades militares que, según los usuarios, son cómplices de esta injusticia.

Los veteranos de tropa, quienes después de 45 años de servicio son despedidos con poco más de 700 euros al mes, se ven obligados a enfrentar el paro a una edad complicada ya para encontrar empleo y sin formación equivalente en el ámbito civil. "Entiendo que para muchos jóvenes el ejército sea la única o mejor salida profesional, pero esta precariedad solo se solucionará cuando la gente deje de alistarse", concluyó un comentario, subrayando la necesidad de reformas urgentes.

Este caso de Martín Suárez no es aislado, sino un reflejo de la discriminación sistémica que sufren los militares de tropa, considerados por algunos partidos políticos como mano de obra barata. La indignación crece y la demanda de una reestructuración en las políticas de personal del Ministerio de Defensa se hace cada vez más urgente.